sábado, 4 de marzo de 2017

Cuando nuestra Autoestima es más alta…

Cuando nuestra Autoestima es más alta…



A menudo somos demasiado exigentes con nosotros mismos; somos demasiado severos.
Cuando nuestra autoestima es más alta empezamos a aceptarnos tal y como somos, con nuestros defectos y nuestras virtudes.
¿Cómo podemos mejorar la autoestima?
Nacemos conscientes de nuestra perfección innata y sintiéndonos merecedores de todo lo bueno. Nuestra autoestima está intacta.
Después, empezamos a escuchar a los adultos que nos rodean y a grabar sus propios mensajes negativos, en nuestro propio disco mental, aún virgen, de toda negatividad por falsa creencia, alguna. Porque los amamos, los consideramos y sin condiciones damos por hecho, en el principio de nuestra vida, que ellos tienen el monopolio de la verdad. Así empieza amenguar nuestra autoestima.
Ahora, comenzamos a negar nuestra propia magnificencia, renunciamos a nuestra autoestima. Aprendemos a sentirnos confundidos con la vida y con nosotros mismos, sin considerarnos, más que las nuestras, las reacciones de los adultos que nos rodean y enseñan. Es decir, si hemos vivido con personas desdichada, coléricas, asustadizas, críticas, con sentimientos de culpa, y baja autoestima habremos escuchado y aprendido cosas negativas sobre nosotros mismos, sobre los demás y sobre la vida.
La base de todo problema, malestar, sensación de no merecer lo bueno... es siempre la falta de amor por uno mismo (autoestima), el olvido de nuestra auténtica identidad, el rechazo inculcado de nuestro propio yo. De ahí en adelante, nos es muy difícil aceptarnos, pues llevamos dentro esas informaciones ajenas sobre quiénes somos. Empezamos a creer en supuestos defectos, creencias que nos hacen caer poco a poco, en la imposibilidad de amarnos y aceptarnos tal y como somos. Nuestra autoestima sigue menguando. A cada instante nos exigimos ser o alcanzar lo perfecto y si no lo conseguimos, nos auto prohibimos el sentirnos felices y gusto con nosotros mismos.
Pero. ¿Y quién ha dicho que debamos de ser perfectos? ¿Acaso conocemos a alguien perfecto?
El trabajo de recuperación de la autoestima, no es ni más ni menos que un proceso re educativo y liberador de nuestra realidad innata, como ser y como persona. Es como vaciar un cubo que ha sido llenado de basura. Rehabilitar nuestra autoestima es limpiar para recuperar nuestro espacio interior. Es sentirnos de nuevo a gusto en nuestra cotidianidad. Nos permite volver a casa, volver a la conciencia del porqué de nuestra presencia en esta vida humana, en pleno corazón del universo. Reconocerse a uno mismo, descubrirte, re aprender a vivir, aceptarse en el momento presente, el aquí y ahora, sabiéndose libre, siempre dispuesto a cambiar para evolucionar, aquello que nuestro propio corazón nos va dictando desde su autenticidad.
A continuación, vas a descubrir o re descubrir, algunos pasos sencillos y útiles para recrear el sendero del respeto y la aceptación:
Deja de criticarte: ¡Decídete a dejar eso atrás! Simplemente se. Descubrirás que eres una persona maravillosa tal como eres hoy. Si leyendo esto te surgen pensamientos tales como: "Si, pero no habla de mi" o "Si supiera las cosas tan feas que hay en mi". "No sabe lo mal que yo me porto"... Entonces, no has aceptado todavía, ver y entender que tu también eres una persona esencialmente maravillosa tal como eres, ahora mismo con todas tus imperfecciones; si, imperfecciones que existen en ti para que tú, y nadie más, las vayas corrigiendo a lo largo de tu vida. Si realmente estás haciendo todo lo que puedes para sanarte, para mejorar, como cada uno de nosotros en este planeta y en este universo, en función de tus conocimientos de tu conciencia y al ritmo de tu propia evolución, entonces todo está bien. Me amo y me acepto tal y como soy. Mi autoestima crece a cada instante.
Deja de asustarte: ¿Cuántas veces nos hemos imaginado lo peor en relación a un problema que tuviésemos? Somos seres responsables; nosotros elegimos que pensar y cómo tratar las situaciones en nuestros días. ¡Aumentar, incrementar las que sean difíciles por pensamientos negativos, pueden resultar paralizante! ¿Acaso hay alguien más que tú en tu propia cabeza? Naturalmente no. Entonces no podemos culpar a nadie, de obligarnos a ser negativos o de pensar por nosotros mismos, pues nadie puede meterse en nuestra mente. Así vemos que podemos, sin que nadie nos lo pueda impedir, sustituye todo pensamiento negativo por otro más sano la afirmación positiva es una herramienta poderosa que nos permite ver las cosas con más claridad. Esta toma de conciencia abre las puertas a la acción y libera considerablemente nuestro estado mental.
Se amable, cariñoso/a y paciente contigo mismo/a: La impaciencia es la mayor resistencia a la evolución, al cambio. Claro que nos equivocamos y cometemos errores. Esto es natural en todos los seres humanos. El proceso de transformación humano exige tropiezos facilita dores del cambio. La única forma de aprender es aceptar los errores. ¿Quién podría corregirse antes de haber identificado y aceptado la falta o las equivocaciones?
Se cariñoso/a con tu mente: Dejemos de culparnos y sentirnos culpables: Pues la culpa sólo busca el castigo, ¡nunca buscar la solución! Las experiencias sirven para aprender y superar, no para derribarnos. Por muy inteligente que sea un niño, va al colegio para aprender. Ningún maestro le pediría que llegue a clase para tomar su puesto.
Elogiarte: Cuando aprendas una nueva experiencia, no te critiques, elogia te por haberlo hecho lo mejor que pudiste en ese momento. Se constante. Con elogiarte un par de veces no es suficiente.
Pide ayuda: La mayoría de nosotros nos hemos criado en la creencia de que debemos hacer las cosas solos y sin pedir ayuda. Especialmente en los temas que tocan emociones, sentimientos, etc... En lugar de intentar hacerlo todo sólo, agotarnos y muchas veces no conseguirlo, la próxima vez pide ayuda.
Ama los rasgos que menos te gusta en ti: Todos hemos hecho elecciones negativas en algún momento de nuestras vidas. Si nos enfadamos y/o castigamos por ello, lo único que hacemos es perpetuarnos en esa elección. Cuida tu cuerpo:  La aceptación y el respeto por nosotros mismos, la autoestima, pasa necesariamente por el cuidado de nuestro cuerpo.
Practica las afirmaciones: Nuestras creencias crean nuestras experiencias. Nosotros elegimos que pensar. Las afirmaciones positivas son formas de re programar nuestros pensamientos hacia otros más positivos y beneficiosos. Practica afirmaciones para fomentar tu autoestima.
Aceptarte Ya en este preciso instante: No esperes a haber arreglado las cosas o a que los demás, también para aceptarte y respetarte tal como eres. El momento en que poder estar siempre en el presente, es ahora.
No estamos aquí para contentar a otras personas o para vivir conforme a sus directrices. Sólo podemos vivir a nuestra manera y caminar por nuestra propia senda. Cuando abandonemos el planeta no nos llevaremos a nuestras parejas, nuestros autos, nuestra casa, etc.... Si no a nuestra capacidad de amar.

"Nuestra autoestima aumenta constantemente a partir de ahora".




No hay comentarios:

Publicar un comentario