Cuando nuestra Autoestima es más alta…
A menudo somos demasiado exigentes con nosotros mismos;
somos demasiado severos.
Cuando nuestra autoestima es más alta empezamos a aceptarnos
tal y como somos, con nuestros defectos y nuestras virtudes.
¿Cómo podemos mejorar la autoestima?
Nacemos conscientes de nuestra perfección innata y
sintiéndonos merecedores de todo lo bueno. Nuestra autoestima está intacta.
Después, empezamos a escuchar a los adultos que nos rodean y
a grabar sus propios mensajes negativos, en nuestro propio disco mental, aún
virgen, de toda negatividad por falsa creencia, alguna. Porque los amamos, los
consideramos y sin condiciones damos por hecho, en el principio de nuestra
vida, que ellos tienen el monopolio de la verdad. Así empieza amenguar nuestra
autoestima.
Ahora, comenzamos a negar nuestra propia magnificencia,
renunciamos a nuestra autoestima. Aprendemos a sentirnos confundidos con la
vida y con nosotros mismos, sin considerarnos, más que las nuestras, las
reacciones de los adultos que nos rodean y enseñan. Es decir, si hemos vivido
con personas desdichada, coléricas, asustadizas, críticas, con sentimientos de
culpa, y baja autoestima habremos escuchado y aprendido cosas negativas sobre
nosotros mismos, sobre los demás y sobre la vida.
La base de todo problema, malestar, sensación de no merecer
lo bueno... es siempre la falta de amor por uno mismo (autoestima), el olvido
de nuestra auténtica identidad, el rechazo inculcado de nuestro propio yo. De
ahí en adelante, nos es muy difícil aceptarnos, pues llevamos dentro esas
informaciones ajenas sobre quiénes somos. Empezamos a creer en supuestos
defectos, creencias que nos hacen caer poco a poco, en la imposibilidad de
amarnos y aceptarnos tal y como somos. Nuestra autoestima sigue menguando. A
cada instante nos exigimos ser o alcanzar lo perfecto y si no lo conseguimos,
nos auto prohibimos el sentirnos felices y gusto con nosotros mismos.
Pero. ¿Y quién ha dicho que debamos de ser perfectos? ¿Acaso
conocemos a alguien perfecto?
El trabajo de recuperación de la autoestima, no es ni más ni
menos que un proceso re educativo y liberador de nuestra realidad innata, como
ser y como persona. Es como vaciar un cubo que ha sido llenado de basura.
Rehabilitar nuestra autoestima es limpiar para recuperar nuestro espacio
interior. Es sentirnos de nuevo a gusto en nuestra cotidianidad. Nos permite
volver a casa, volver a la conciencia del porqué de nuestra presencia en esta
vida humana, en pleno corazón del universo. Reconocerse a uno mismo,
descubrirte, re aprender a vivir, aceptarse en el momento presente, el aquí y
ahora, sabiéndose libre, siempre dispuesto a cambiar para evolucionar, aquello
que nuestro propio corazón nos va dictando desde su autenticidad.
A continuación, vas a descubrir o re descubrir, algunos
pasos sencillos y útiles para recrear el sendero del respeto y la aceptación:
Deja de criticarte: ¡Decídete a dejar eso atrás! Simplemente
se. Descubrirás que eres una persona maravillosa tal como eres hoy. Si leyendo
esto te surgen pensamientos tales como: "Si, pero no habla de mi" o
"Si supiera las cosas tan feas que hay en mi". "No sabe lo mal
que yo me porto"... Entonces, no has aceptado todavía, ver y entender que
tu también eres una persona esencialmente maravillosa tal como eres, ahora
mismo con todas tus imperfecciones; si, imperfecciones que existen en ti para
que tú, y nadie más, las vayas corrigiendo a lo largo de tu vida. Si realmente estás
haciendo todo lo que puedes para sanarte, para mejorar, como cada uno de
nosotros en este planeta y en este universo, en función de tus conocimientos de
tu conciencia y al ritmo de tu propia evolución, entonces todo está bien. Me
amo y me acepto tal y como soy. Mi autoestima crece a cada instante.
Deja de asustarte: ¿Cuántas veces nos hemos imaginado lo
peor en relación a un problema que tuviésemos? Somos seres responsables;
nosotros elegimos que pensar y cómo tratar las situaciones en nuestros días.
¡Aumentar, incrementar las que sean difíciles por pensamientos negativos,
pueden resultar paralizante! ¿Acaso hay alguien más que tú en tu propia cabeza?
Naturalmente no. Entonces no podemos culpar a nadie, de obligarnos a ser
negativos o de pensar por nosotros mismos, pues nadie puede meterse en nuestra
mente. Así vemos que podemos, sin que nadie nos lo pueda impedir, sustituye
todo pensamiento negativo por otro más sano la afirmación positiva es una
herramienta poderosa que nos permite ver las cosas con más claridad. Esta toma
de conciencia abre las puertas a la acción y libera considerablemente nuestro
estado mental.
Se amable, cariñoso/a y paciente contigo mismo/a: La
impaciencia es la mayor resistencia a la evolución, al cambio. Claro que nos
equivocamos y cometemos errores. Esto es natural en todos los seres humanos. El
proceso de transformación humano exige tropiezos facilita dores del cambio. La
única forma de aprender es aceptar los errores. ¿Quién podría corregirse antes
de haber identificado y aceptado la falta o las equivocaciones?
Se cariñoso/a con tu mente: Dejemos de culparnos y sentirnos
culpables: Pues la culpa sólo busca el castigo, ¡nunca buscar la solución! Las
experiencias sirven para aprender y superar, no para derribarnos. Por muy
inteligente que sea un niño, va al colegio para aprender. Ningún maestro le
pediría que llegue a clase para tomar su puesto.
Elogiarte: Cuando aprendas una nueva experiencia, no te
critiques, elogia te por haberlo hecho lo mejor que pudiste en ese momento. Se
constante. Con elogiarte un par de veces no es suficiente.
Pide ayuda: La mayoría de nosotros nos hemos criado en la
creencia de que debemos hacer las cosas solos y sin pedir ayuda. Especialmente
en los temas que tocan emociones, sentimientos, etc... En lugar de intentar
hacerlo todo sólo, agotarnos y muchas veces no conseguirlo, la próxima vez pide
ayuda.
Ama los rasgos que menos te gusta en ti: Todos hemos hecho
elecciones negativas en algún momento de nuestras vidas. Si nos enfadamos y/o
castigamos por ello, lo único que hacemos es perpetuarnos en esa elección.
Cuida tu cuerpo: La aceptación y el
respeto por nosotros mismos, la autoestima, pasa necesariamente por el cuidado
de nuestro cuerpo.
Practica las afirmaciones: Nuestras creencias crean nuestras
experiencias. Nosotros elegimos que pensar. Las afirmaciones positivas son
formas de re programar nuestros pensamientos hacia otros más positivos y
beneficiosos. Practica afirmaciones para fomentar tu autoestima.
Aceptarte Ya en este preciso instante: No esperes a haber
arreglado las cosas o a que los demás, también para aceptarte y respetarte tal
como eres. El momento en que poder estar siempre en el presente, es ahora.
No estamos aquí para contentar a otras personas o para vivir
conforme a sus directrices. Sólo podemos vivir a nuestra manera y caminar por
nuestra propia senda. Cuando abandonemos el planeta no nos llevaremos a
nuestras parejas, nuestros autos, nuestra casa, etc.... Si no a nuestra
capacidad de amar.
"Nuestra autoestima aumenta constantemente a partir de
ahora".
No hay comentarios:
Publicar un comentario