¡¡Despierta!!
Cada dolor te hace más fuerte, cada traición más
inteligente, cada desilusión más hábil y cada experiencia más sabio”
“¡¡No, no, hay que quitarse de la
cabeza estos pensamientos que me invaden!! ¿A dónde voy yo con estas cosas en
la cabeza? ¡¡ Son sueños inalcanzables!! Levantémonos de la cama, y a seguir la
rutina de siempre. Déjate de tonterías…”
Nos intentamos AUTOENGAÑAR.
Tenemos miedo hasta pensar que una vida nueva podría ser posible.
Y claro que es posible, pero entre el miedo que te atenaza, el pensar en que
quizá podemos fracasar o en lo que pensaran los demás, cuando digamos que
queremos un cambio en nuestra vida, mejor pensar en otra cosa… Y ante eso,
preferimos seguir llevando la venda que llevábamos en los ojos y seguir el
“rebaño” que se llama sociedad. No queremos salirnos de él, por miedo a las
consecuencias.
Pero unos, siguen con la venda en los ojos, hasta que, en
cierto momento, ya pasada la oportunidad, se arrepientan de aquella situación
que no aprovecharon. Sin embargo, hay otros que escogen otro camino.
ROMPEN LAS CADENAS.
Sienten que, durante muchos años de su vida, han estado
atados de pies y manos. Su vida era dirigida por otras personas. “Hijo tienes
que estudiar lo mismo que hizo tu padre, Amigo, no te recomiendo esa persona,
no te hará bien, Esa carrera no tiene salidas, búscate otra pareja, con esa no
te veo feliz, Tú sueño nunca se hará realidad, olvídate, Sigue con ese trabajo,
nunca encontrarás otro mejor…” Con el paso de los años, se habían dejado llevar
por las opiniones, reflexiones de los demás, y mientras sus sueños, sus retos,
se habían ido hundiendo más y más en el fondo de su subconsciente.
Pero esa situación, ya se ha terminado. Han roto las cadenas
que les unían a esa “tiranía” de los deseos de los demás, y ahora solo tienen
un lema: “YO SOY EL DUEÑO DE MI DESTINO, NADIE MÁS”.
Esas cadenas las usan para coger las riendas de su vida.
Saben que esos sueños son posibles, aunque otras personas hayan dicho que no.
Si ellos no los han conseguido, ellos piensan que SI que lo harán.
Y empiezan a dar el paso adelante que sabían qué hace tiempo
tenían que haberlo dado. Empiezan a caminar por el camino más trillado que se
podrían haber imaginado, pero es el camino que les hace felices. El camino les
decía que fueran por él y por fin se han adentrado en él.
Empiezan a ver la vida, con OJOS NUEVOS.
Empiezan a ver oportunidades dónde antes solamente veían
cadenas que les oprimían. Empiezan a disfrutar de su pasión, de su sueño. A
conocer gente que tienen los mismos intereses que ellos, a ilusionarse, a
sentirse motivados, a tener fe, en que la vida puede ser maravillosa por fin.
APRENDEN, FRACASAN Y SE PREPARAN.
Devoran todo lo que tenga que ver con sus sueños. Devoran la
vida, sorbo a sorbo, algo inimaginable para ellos hace tiempo.
Como en todo comienzo, también se fracasa, más bien se
aprenden de las experiencias. Intentan cosas que nunca habían hecho, pues no
siempre salen a la primera los resultados deseados. Pero para ellos, no
fracasan, aprenden de la experiencia. Sienten que se están preparando para ese
sueño que siempre han anhelado. Solo es una experiencia más a añadir a su
escaso bagaje hasta ese día.
Durante el camino, estas personas que han decidido despertar,
se dan cuentan que se están VACIANDO y
a la vez, LLENANDOSE DE
NUEVOS PENSAMIENTOS.
Se vacían, ya se están deshaciendo del pasado que habían
vivido. Ya no va con ellos pensamientos negativos, esa desconfianza que
impregnaba su vida, es historia. Ya no dejan que los demás guíen su vida, él es
el capitán del barco llamado vida.
Y a la vez, se llenan de nuevos pensamientos. “Yo sí puedo,
voy a ser feliz, lo voy a conseguir, voy a disfrutar con mi pasión y la voy a
convertir en mi trabajo. Lo voy a conseguir. Soy feliz.” Son algunos de los
pensamientos que recorren su cuerpo. Pensamientos que les alientan a seguir
adelante.
PRUEBAN Y FINALMENTE CONFIRMAN.
Prueban y prueban. Saben que lo van a conseguir. No saben el
“cómo”, pero a ellos solamente les importan una cosa, el “qué”. Saben qué
quieren ser a partir de ahora, y si para ello tienen que ser flexibles, lo van
a ser. Si por una opción, no ha surgido, prueban con otra. Así hasta que, por
fin, confirman sus expectativas.
Confirman que por fin lo han conseguido. Han conseguido
romper las cadenas que les ataban a su familia o a su pareja, confirman que ese
sueño que parecía imposible, lo han hecho realidad, porque sabían que así iba a
ser.
Confirman que una nueva vida es posible.
Ya han llegado a su cima. Sonríen, lo han conseguido, ven
desde lo más alto, sus esfuerzos, lo que han superado, las opiniones que no han
dejado que se echara atrás.
¿Y ahora qué?
Es una nueva vida, para aquellos que por fin han conseguido
quitarse la venda de los ojos. Es una vida SIN MIEDO.
Ya no tienen miedo a todo lo que la vida les ponga por
delante. Saben que pueden conseguir lo que quieran, porque lo han hecho. Saben
que todo es posible, con esfuerzo, valor y entusiasmo.
El miedo los había atenazado durante años, pero eso ya no
iba a ocurrir.
CONFIAN EN ELLOS MISMOS, JAMÁS SE MENTIRAN EN RELACIÓN A LO
QUE SIENTAN Y QUIERAN. NO MÁS MIEDO EN SUS VIDA. HAN DESPERTADO SU VERDADERO
YO.
¿Te da miedo quitarte la venda de los ojos? ¿Qué no quieres
ver? ¿Estás disfrutando de tu verdadero YO? ¿Qué quieres probar de verdad? ¿Por
qué no lo intentas? ¿De qué pensamientos quieres llenarte? ¿En qué fase de tu
despertar estás?