lunes, 16 de marzo de 2015

El arte de hablar y la virtud de callar...

    El asunto es que malgastamos nuestro valioso tiempo en hablar mucho y decir poco, por esta razón, debemos aprender primero a "callar" para poder "hablar".

    Hablar es fácil pero callar requiere prudencia y dominio:.

> Hablar oportunamente, es acierto.

> Hablar frente al enemigo, es civismo.

> Hablar ante la injusticia, es valentía.

> Hablar para rectificar, es un deber.

> Hablar para defender, es Compasión.

> Hablar ante un dolor, es consolar.

> Hablar para ayudar a otros, es caridad.

> Hablar con sinceridad, es rectitud.

> Hablar de sí mismo, es vanidad.

> Hablar restituyéndose fama, es honradez.

> Hablar disipando falsos, es conciencia.

> Hablar de defectos, es lastimar.

> Hablar debiendo callar, es necedad.

> Hablar por hablar, es tontería.

< Callar cuando acusan, es heroísmo.

< Callar cuando insultan, es amor.

< Callar las propias penas, es sacrificio.

< Callar de sí mismo, es humildad.

< Callar miserias humanas, es caridad.

< Callar a tiempo, es prudencia.

< Callar en el dolor, es penitencia.

< Callar palabras inútiles, es virtud.

< Callar cuando te hieren, es santidad.

< Callar para defender, es nobleza.

< Callar defectos ajenos, es benevolencia.

< Callar debiendo hablar, es cobardía.

    Debemos primero aprender a "callar" para poder "hablar" luego, pero siempre con acierto y a tino, porque si "hablar es plata, "callar es oro"...

    Recuerda siempre que tus palabras sean más importantes que el silencio que se rompe...

Autor desconocido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario