martes, 17 de febrero de 2015

¿Tú quieres esconder algo?. (La inflada autoestima). (Primera parte).

    La soberbia no es grandeza sino hinchazón; y lo que está hinchado parece grande pero no está "sano".

    Hace unos días, estaba esperando en una caja de un supermercado, y el cliente que estaba delante de mí empezó a contarle a la cajera, sin motivo alguno y sin conocerla, un montón de cosas sobre el mismo, sus éxitos, sus virtudes, lo perfecto que era, hice mi carrera sobresaliente, mi hija está haciendo un doctorado, actualmente "soy directo en una empresa"...

    La pobre cajera lo miraba y asentía ¿qué iba a hacer?, Pero el nombre seguía y seguía hablando de sí mismo de forma exagerada, como esperando algún reconocimiento por parte de ella o una aprobación.

Me llamó muchísimo la atención y pensé.

¿Porque tendrá esa necesidad de reconocimiento de alguien que ni siquiera conoce?. No dudo en que el hombre tuviera todo eso en su vida y es maravilloso, pero.

¿Por qué tanta necesidad en resaltarlo y que se entere todo el mundo?.

    Aunque a priori pensemos que este hombre tiene una autoestima alta y sana porque parece que eso es lo que nos quieren hacer ver, la realidad es que esto no es exactamente así, sino más bien, todo lo contrario.

    Las personas con una autoestima alta y óptima se sienten seguros de sí mismos y esa seguridad nace de su propio interior y no es dependiente del exterior, ni de los logros, ni de los éxitos, ni del físico. Es cierto que estas cosas influyen, pero para nada determinan la autoestima.

    Por lo tanto, alguien que está continuamente buscando alabanzas y valoraciones por parte de los temas, está demostrando que el mismo carece de ellas, pero lo que probablemente no se guste asimismo o no le guste como es su vida, pero lejos de reconocerlo y ponerse en marcha para cambiar, lo esconde, si lo esconde, se disfraza y le dice a todo el mundo lo maravilloso que es el todo lo que le rodea, y de esta manera, con este falso reconocimiento, se siente seguro a corto plazo... ¡La posibilidad de un rechazo sería terrible!.

    El problema es que si bien es fácil engañar a los demás y hacerles creer que somos quien en realidad no somos, no lo es tanto engañarse a uno mismo.

    La autoestima inflada surge en la infancia. El niño que no ha recibido por parte de su entorno aprobación, admiración o amor de forma adecuada se percibe a sí mismo como un ser carente de valor por lo que desarrollará una autoestima baja.

    Una vez que el niño es adulto, puede optar por dos caminos diferentes: O bien demandar amor y aprobación por parte de los demás siendo sumiso a las peticiones, dependiente, sin saber decir que no hay nada y carente de asertividad por ese miedo al rechazo. O bien exagerar su identidad y su auto confianza siendo vanidoso y narcisista y de esta manera protegerse a la posibilidad de que alguien les haga daño o les diga que han fracasado o fallado en algo.

    En el fondo, son personas que tienen muchísimo miedo al rechazo y a fracasar, así como a no ser aprobados y reconocidos por todo el mundo. Su actitud es como un camuflaje.

Continúa...

No hay comentarios:

Publicar un comentario